Javier Bauluz, un ciudadano con cámara

Sin ánimo de lucro, con ánimo de ofender. Los premios otorgan reconocimiento, pero también distraen del oficio. El único Pulitzer español se erige ante la palestra comunicativa y despliega todos los anhelos de contribuir al desarrollo y refundación del nuevo periodismo. Javier Bauluz, se remonta, en sus discursos ante decenas de alumnos futuros periodistas, a tiempos en los que las fotografías siempre eran de blanco y negro y dónde cualquier cuarto de baño puede convertirse en un laboratorio improvisado. Un conjunto de diapositivas con sus experiencias define la trayectoria de un deseo de inquietud.

Palabras que ante un actual estudiante conectan con los inicios de este periodista gráfico nacido en Oviedo en 1960 que decidió en 1981 encaminar una aventura; como otros tantos jóvenes se fue a la capital británica a fregar platos para aprender inglés. Experiencias que según él todo el mundo debería hacer en su vida; con una cámara de fotos estuvo en la manifestación en el inmenso Hyde Park, en primera línea de batalla captó su más querida instantánea; el retrato que definiría lo que quería hacer. Cuando empezó en Asturias, el periodista era el que buscaba el sentimiento de la noticia; el fotógrafo era el que llevaba los cafés. Corrompido el sentimiento de la mayoría de periodistas de redacción, él actúa; han pasado ya casi treinta años; Marruecos, España, Nicaragua, Ruanda, Bosnia, Chiapas, Chile, Perú, Gautemala… Insistió y aprendió a ser un periodista humano. Associated Press, Reuters, Staff; publicaciones en The New York Times, The Washington Post, The Independent, Der Spiegel, El País, fotografías y miradas de una realidad poco atractiva a veces; sin caer en el morbo, Bauluz crea sentimientos, dislumbra con imágenes que llegan al corazón y a la cabeza pero no al estómago.

Galardón para el trabajo realizado junto a sus compañeros de Associated Press cubriendo el genocidio en Ruanda; Javier Bauluz se erigía como primer español y único en ganar el premio Pulitzer en 1995. La brutalidad en la intifada palestina, los desaparecidos en Chile, la violación de los derechos humanos en El Salvador, la interminable sangría de Sarajevo o la revolución zapatista en Chiapas, son algunos de los puntos negros del planeta de los que fue testigo.

Espectador de la nueva marea anti inmigración; el periodista asturiano sintió vergüenza y estupor al reconocer que imágenes captadas en las costas españolas no difieren de trabajos realizados a cientos de kilómetros, donde la realidad parece que pasa de largo. Bauluz dio una zotaína moral a la sociedad occidental al mostrar la dolorosa imagen de la ignorancia del egocentrismo. Una pareja de bañistas que muestran indiferencia ante el cadáver de un inmigrante en las costas de Zahara de los Atunes (Cádiz). Desde Hollywood Angelina Jolie utiliza su instantánea para ejemplificar la hipocresía y frialdad de la civilización. No todos son elogios; la incertidumbre de la función social del Periodismo inundó la figura del periodista Arcadi Espada arremetiendo contra la falsa filantropía del Pulitzer español, parece ser que no era la óptica adecuada.

Conciso y sensible en su lucha; no sólo utiliza sus fotos para cerrar bocas; el fotógrafo que plasmó la cara más agria de la inmigración respondió a Rajoy ante las declaraciones que incitaban el odio al diferente; frágil ante su mejor aliada; la cámara, se echa a llorar.

Experiencia y los años de trabajo permiten la gran rotundidad con la que defiende los nuevos argumentos esbozados en su nuevo frente de batalla; el nuevo periódico digital, el proyecto de una mirada social que enlaza con la función periodística del ciudadano. Fundador y director de Periodismo Humano, otro tipo de medio de comunicación para aquellas personas que desde su casa contribuyan al respeto por el derecho de ser informado. Nostalgia, energía y tranquilidad ante la responsabilidad de plasmar la realidad que callan los magnates de la comunicación. Necesidad de auto regenerarse y de buscar adeptos de verdad; críticos y espectadores ansiosos de derrocar el maniqueísmo periodístico en los últimos años.

Premios y más premios, Premio Libertad de Periodismo, Premio Foto Press o Premio Periodismo y Derechos Humanos en 2008. El más reciente; Periodismo + Derechos Humanos, soporte fundamentalmente crítico y activo. Porque Bauluz trabaja para esto; para que no piensen que sólo él puede cambiar algo, sino porque tal vez a través de la identidad verdadera del periodismo; a partir de lo que cuentes a alguien le dé por pensar, o tal vez por hacer algo.